lunes, 31 de diciembre de 2012

Qué sea Navidad todo el 2013

Despedimos el otoño con la creación de nuestro árbol, dándole la bienvenida a la Navidad. Convertimos las hojas secas, que recogimos en esta estación,en un abeto gigante que adornamos con purpurina dorada, bolas y cintas rojas. El resultado fue espectacular.

Este año nuestra fiesta ha sido muy especial porque no ha faltado ningún peque.Todos disfrutamos de la visita de los papás que fueron muy pacientes escuchando el canto aunque se entrecortó varias veces. Al final lo repetimos del tirón y creo que todos disfrutamos viéndolos escenificar su villancico, alegres. ¡Cómo han crecido en dos años! Que seguros y autónomos se les ve a todos.

Curiosamente en nuestro grupo hay peques de distintas nacionalidades, culturas, religiones,...son movidos, traviesos, activos, inquietos...y sin embargo, tiene un rasgo común que les caracteriza: son "todo corazón". Se aceptan, se quieren y se apoyan como si fuesen miembros de una misma familia. Creo que esto sucede porque entre sus familias se da también esta aceptación y cariño mutuos. Ninguna de nuestras familias puede sentirse excluida de nuestra pequeña comunidad. Todas son acogidos con el mayor cariño por las otras. No tengo la menor duda de que vivimos un auténtico sentimiento de Amistad, con mayúscula.

Lo pasamos muy bien en la fiesta que les organizó el AMPA  de nuestro colegio. Me gustaría felicitar a estos padres de corazón, puesto que tiene todo el peso y son los verdaderos protagonistas de esta fiesta. Todos los años la organizan con el mayor cariño, la máxima dedicación de tiempo, una completa gratuidad y un trabajo que solo puede ser compensado con la alegría de los peques. En una palabra, derraman el autentico espíritu de la Navidad, hacen de auténticos Reyes Magos. Por eso nunca he dejado de creer en ellos.

Ese día en el que los alumnos mayores de sexto, entretuvieron a los peques con sus bailes, instrumentos y entusiasmo, creo que la vida nos llamó a la esperanza, que es lo que nos pide la Navidad. Hicieron "colegio". El ver a todos nuestros peques y chicos más mayores reunidos, tratando de ser uno en su alegría, no tiene precio. Ha sido el mejor regalo que hemos podido recibir.Ojalá siga siendo Navidad todo el año 2013.

Feliz año a todos...






domingo, 30 de diciembre de 2012

Ritmo con corazón

Con motivo de los cumpleaños de otoño recibimos una visita muy especial. El papá de José Manuel vino con un amigo a darnos un concierto como regalo.

Recibimos con sorpresa y alegría la presentación de los instrumentos: dos guitarras, la batería y un contrabajo. Pero todo fue una auténtica estupectación cuando comenzaron a sonar. Era para ver la cara de los peques al oír el ritmo más moderno que bailaron sus abuelos. Del asombro y la pasividad pasaron a marcar tímidamente el ritmo, de marcar el ritmo a vapulearse sobre su sitio y de vapulearse a bailar en la improvisada pista de baile al final de la sala del gimnasio. Unos seguían a otros y al final casi todos acabaron bailando a ritmo de rock and roll.

Ritmo que a los peques les fascinó porque, fundamentalmente, sonaba sobre todo con acordes salidos del corazón. Los niños conectaron con mucha facilidad con los músicos. Ni que decir tiene que considero que pocas veces habrán podido, estos, disfrutar de un público más entusiasta. Pronto fueron todos uno.

Como guinda para el pastel…los peques tuvieron oportunidad de probar la guitarra y la batería. También de admirar de cerca el contrabajo que para ellos es un violín gigante de voz ronca. Todo ello, acompañado por el afecto, la sonrisa y la dulzura de nuestros músicos que, con toda la paciencia del mundo fueron acompañando suavemente a los peques en su sueño de compositores improvisados.

¡Muchas gracias por vuestra música y vuestra ternura! Os deseamos lo mejor y que sigáis haciendo felices a todos los que os escuchen como nos hicisteis a nosotros. 



viernes, 28 de diciembre de 2012

Cinco vueltas al sol

Hace algunos  días celebramos el cumple de los más peques de la clase, todos los nacidos en el último cuatrimestre del año. Ese día nos acompañaron sus padres que nos prepararon una mesa preciosa, llena de cosas ricas para un día especial.

Fuimos contando y escenificando las vueltas que cada uno ha dado al sol, cinco. Les costó algo comprender el ejercicio porque no les había marcado en el suelo la órbita de la tierra. Tenían que rodear cinco veces al sol de papel maché que decora nuestra clase. Al final, todos corearon la trayectoria de cada vuelta que iban recorriendo, ayudando a los homenajeados. Entonces, les resultó divertido.

Lo pasaron genial también jugando al “juego de la sorpresa”, un auténtico juego de autodominio. Consiste en ir pasando un regalo mientras suena la música. Cuando para, durante el espacio de silencio, pueden desenvolverlo, tratando de no romper el papel. Si empieza de nuevo, la música hay que pasarlo otra vez, esté como esté. Tuvieron que abrir un montón de cajas ya que un regalo incluía a otro regalo. Al final, hallaron  una bolsa de caramelos y monedas de chocolate para repartir entre todos. ¡Un gran tesoro!
El desayuno fue delicioso aunque alguno tuvo alimento para todo el día. Es que hay unos cuantos glotoncillos. Muy buena nuestras tartas caseras de las que no quedaron ni las migas.

Es importante que pensemos que estas fiestas infantiles tiene un objetivo muy concreto: “gozarnos de que estos amigos existan entre nosotros”. “Agradecer la oportunidad que la vida nos da de quererlos, escucharlos y recibir su afecto”. No se trata tanto de subir a pedestales a los pequeños, ni de darles en ese día todos los gustos, sino de que compartan su vitalidad, su felicidad y su afecto con todos los que los redeamos. Y que agradezcan la alegría que los otros muestran por haberlos conocido y por ser sus compañeros y amigos, dándose también ellos a los que los quieren.

sábado, 22 de diciembre de 2012

A de automóvil.

Visita al Museo Automovilístico de Málaga

El pasado día cinco pagué a los peques una deuda que tenía pendiente. Desde que tenían tres añitos, les había prometido una visita al Museo Automovilístico de Málaga. Por fin, marchamos con ilusión.

Interesante encuentro y sorprendente exposición. Nos hicieron un taller de educación vial al llegar aunque lo cierto es que, después de un rato, los niños denotaban impaciencia. Habíamos estado viendo los coches en la página web del museo y estaban deseando ver el coche con la calavera, el de los diamantes y el de hidrógeno...
Por fin, vimos los coches que usaron nuestros antepasados y pudimos imaginar lo que pudo suponer para los bisabuelos o tatarabuelos viajar en esos incomodísimos aunque completísimos automóviles y esas velocidades que hoy nos parecen irrisorias. No obstante la belleza de estos vehículos no es discutible. Con una conservación inmejorable, los niños pudieron hacerse una idea de los inicios de estas máquinas.

Sorprendentemente, lo que más les llamo la atención fueron los coches de energías alternativas, pese a que algunos de ellos, como el de vapor, eran igualmente antiguos. Impresionante los de líneas más futuristas como los que funcionaban con hidrógeno o con energía solar. Los niños llegaron a clase repitiendo estas explicaciones y es curioso como apreciaban el valor de estas experiencias en busca de nuevas fuentes de energía.

Tal vez, eche de menos los coches que vi circular en mi niñez, que han dado paso a modelos más seguros, cómodos y funcionales. Esperaba encontrarme con el seiscientos, el ochocientos cincuenta, los dos caballos, el mini, el Renault 4 …aquellos coches que algunos pocos privilegiados disfrutaban y en los que sorprendentemente cabía toda la familia con sus correspondientes maletas, fueran  los miembros que fuesen. También  un motocarro, como aquel azul que adornaba mi calle, cuando era pequeña, y  en el que nos subíamos toda la chiquillería del barrio y, agradecida, en el tiempo, al dueño que nunca salió a echarnos de su preciado bólido. En pocas  palabras, un paseo por la niñez de aquellos que ya no vamos siendo tan jóvenes, de modo que podamos contar también nuestra batallitas a los más jóvenes.

Os animo a visitarlo y disfrutar un rato con vuestros hijos e hijas. Ellos pueden haceros de guía y lo pasaran bien compartiendo con vosotros lo que bien pudimos apreciar aquel día. Mientras tanto, os invito a  disfrutar con nuestros recuerdos.